A falta de crédito... (Luzhkov)

La noche cayo sobre ciudadela, el hambiente se notaba un poco humedo... - Que asco odio la humedad - muy poca gente se veía en la calle para estas horas ya era cerca de media noche pero, no tenía otro momento que me dejara desocuado como para venir, a esta hora normalmente seguia practicando punteria y movimiento, pero hoy no podia necesitaba recargar mi tarjeta porque en unos dias se casaria una amiga y debía comprar un vestido bien descente. Seguro que llegaria tarde o que a mitad de la fiesta me estarían llamando a que volviera a la base porque se les rompio la cafetera, la tostadora, la pantalla táctil del móbil.
Encuanto a la tecnología muchos de mis compañeros eran unos trogloditas, sin ofender a la raza por favor.

Al menos ahora que andaba por la calle vestía normal, bueno "normal", seguía con el traje de entrenamiento pero, por lo menos no estaba tapada en cargas, armas, bombas de nitrógeno y nitroglicerína. El traje que nos tocaba por se los buenos era blanco, seguro que los malos iban vestidos de negro. Segúro y despues dicen que las peliculas del pasado no se asemejaban a la realidad. No a la suya, si a la nuestra, por lo menos el traje era bien ajustado y dejaba diferenciar el sexo. Por lo menos hasta donde yo sabía era la unica mujer reclutada en la UFE, asique mis compañeros me veían como la marimacho del grupo o la ama de llaves que tenía que ir limpiando todas las cosas que dejaban repartidas detras de ellos. Pero se le caían las babas cada vez que me veían reparando alguna maquina, es como si se acordaran que soy mujer... y menos mal que de vez en cuando se dieran cuenta.

Llegué al cajero del banco intergalactico e inserté mi tarjeta - Bueno a ver... - pense por un ratito y me di cuenta que no recordaba muy bien como era mi clave tenía tres intentos primer intento, ÑEEEK: Fallido, segundo intento ÑEEEK: Fallido. - Dios estas cagadas cibernéticas. - murmuré por lo bajo sacando la tarjeta y volviendola a meter para tener otros tres intentos, estaba cansada y tenia ganas de irme rápido pero al parecer hoy me acostaría tarde.

Era la tipica noche en la que este abogado no tenía nada que hacer, salvo salir de noche y pasar un buen rato, con muy buena compañía en su residencia.
El detalle estaba, en que precisamente...esta misma noche no tenía nada que hacer, ni siquiera un buen libro para leer y calmarme, pero eso definitivamente no paso....que dia tan aburrido

Mientras camino observo a mi alrededor y veo lo aburrido que es la vida de la gente que tenía a mi paso, solo caminaban y hablaban de puras incoherencias.

"Que patetico puede llegar a ser la gente...que estres de verdad"

Pienso mientras seguía observando. Había decidido recargarme en un poste de luz y pensar que hacer para no aburrirme, pero definitivamente llegaba a la misma conclusión

"Me seguire aburriendo"

Suspire frustrado, asi que decido sacar mi billetera y ver cuanto lleevaba de dinero...y lo sorprendete de todo...no llevaba dinero, solo tarjetas de credito, identificaciones...y papelitos tontos
Decido ir al banco y sacar un poco de dinero, quizas después ir a beber algo y encontrar chicas guapas...definitivamente soy un sexoso...pero aver, serio , hay que conseguir dinero.

Con esa idea me dirigí al cajero, uno que estaba a 2 calles de donde me encontraba y veo que hay una chica tratando de sacar dinero. Espero a que lo haga, aunque al parecer tenía problemas para poder llevar acabo la operación

-Sucede algo?-

Le pregunto educadamente, esperando su respuesta y viendo si era ella o el cajero el que no dejaba que la chica sacara su dinero

Estaba tan absorta insultando la maquina y mi estupidez que ni me di cuenta que alguien había entrado... Al punto, que al dirigírme la palabra me di un pequeño susto, colocando una mano en mi pecho, para luego largar una risa. Definitivamente estaba tenza, los ultimos años habían sido tan dificiles que por momentos me sentía perseguida hasta por mi propia sombra o quizás hasta de mi trasero. - Lo siento, no fue mi intencion... Yo. - Claro que no era mi intención parecer una completa estúpida, primero por olvidar mi clave y segunda por darme un susto hasta con las mas sutiles palabras.

- Estaba intentando recordar mi clave. - Le contesté casi sin mirarle, me sentía en otro mundo, bueno... Por lo menos en la tierra seguro no estaba, asique nada mas cancelé la operación y le cedí el lugar. - Saca, yo tengo aqui para rato, no te haré perder toda la noche.. - volví hablar cuando finalmente le dirigía la mirada, en lo que me sonreía expresivamente. Y como para no hacerlo, era mas guapo que el mismo diablo. No esque alguna vez lo hubiera visto, pero... quien sabe.

La Fuerza Especial, me consumía tanto, ya no tenía casi vida social, y ya ni cerebro me quedaba para recordar no mas de 5 malditos digitos, ensima solo eran numero... - Bueno, que educacion la mia. Mi nombre es Natalie, y obviamente el problema soy yo. No la maquina... - Le dije extendiéndole la mano y mirando el aparato de pura lata. - Aunque deteste admitirlo. - Y por ultimo solo dejé salir un suspiro un poco lastimero por mi maldita suerte, donde estaba Dios cuando se lo necesitaba, nunca había aparecido en toda la historia humana.

Estaba observando a la chica que tenía enfrente, me estaba produciendo una gran curiosidad.
No se porque pero había notado que se había puesto tensa, quizas mi presencia a esas horas la habría puesto asi...no quería saber como se pondría su supiera que era un demonio

-Tranquila..no te hare nada jejeje-

La seguía observando, tratando de entender sus gestos de saber porque aún no sacaba dinero.
Si por mi hubiera sido, la hago a un lado y me pongo a sacar dinero ya que deseaba ir a tomar y pasara bien, pero con este imprevisto podría tardar un poco....y no me importaba. Hasta que me dijo cual era el problema y solo alzo una ceja...y en vez de molestarme solo sonrio un poco

-Aver...no te preocupes..-

Veo que al fin voltea a verme, sonrio al ver que era demasiado guapa...exitante con el simple hecho de ver su cuerpo...por lo menos de la parte de atrás.
Me acerco al cajero, busco mi tarjeta en mi billtera y luego la inserto en la maquina para comenzar con la operación y obtener el bien que mueve al mundo

-Mucho gusto Natalie...soy Dmitry y bueno...no creo que el problema seas tu, si no más bien lo que te rodea lo que hace que tu cabeza este en otra parte...me suele pasar-

Termino de sacar dinero, me volteo a verla y tomo su mano para poder besarla, luego la miro a los ojos y oh lala...que guapos...sonrio y luego suelto su mano

-Espero que ya puedas sacar dinero...en mi caso sin dinero no me sient nadie-

Digo...como abogado debía de llevar...con los juicios que ganaba eran suficientes para vivir placidamente y darme todos los lujos que quisiera

En algo tenía razón aquel galancito, tenía un problema tan grande ensima que simplemente olvidaba cualquier cosa que no tuviera que ver con entrenamiento, mecanica... Entrenamiento, mecanica... ya mensione entrenamiento antes?. El futuro de toda la raza humana estaba en un puñado de bichos raros que pelearian hasta sus ultimos respiros por salvar el planeta. O vaya, sonaba a prólogo, que estupideces podía llegar a pensar en trasnoche.

- Claro que voy a sacar el endemoniado dinero. - ya lo tenía bien en claro, abriría esa cosa de ojalata como si de una cajita de bombones se tratara. Observé y pude ubicar una camara justo trás de mi, y otra a un costado. Tal vez lo que haría estaría mal visto pero, era eso o ir vestida de milicia a un casamiento.

Y nada mas que un beso en la mano me hizo largar mis planes al bote de la basura. Me sonreí algo tímida por lo que acababa de hacer y me acordé que aun tenía un poco de grasa en las uñas por reparar el motor de criógeno. Después que me soltase la mano la envié a mis espaldas intentando disimularlo con una de mis encantadoras sonrisas. Nunca habían hecho algo asi conmigo, jamas nunca jamás... era algo que pensaba que se tenía reservado para las mujeres del imperio. De las cuales yo me encontraba completamente ausente.

- Vaya que saludo. - Dije aun peleando para que mis pómulos no se sonrosaran, pero de todas formas asi lo hicieron. Podia sentirlo, ese calor en las mejillas.
Me acerqué a la máquina e inserte mi tarjeta nuevamente. - ¿Sales esta noche?. - Pregunte como para sacar algun tipo de conversación en loque discaba otro numero, pero que de todas formas sabía que me iba a dar incorrecto. - Yo, solo quiero sacar el diabólico dinero de este pedazo de chatarra. Ya que me hice un tiempo... - Le conté sabiendo que capaz nisiquiera le importaba o ya se estaba llendo, me mordisquie el labio nerviosa. Necesitaba quitar ese dinero de ahi, y quizas una descarguita electromagnética la confundía y hacia entrar cualquier clave... Abria que ver.

-Te molesto mi saludo?...espero que no-

La seguía observando intensamente a los ojos, era muy atractiva y su forma de ser era interesante...
me dejaba con la boca abierta y embobado...no tanto, solo me producía una gran curiosidad...una humana me producía curiosidad...que genial

-De hecho para eso buscaba el dinero, voy a salir pero no traigo cambio...quiero tomar....y tomar...y no recordar la jodida existencia de los demás...que genial no? -

La observo y veo sus mejillas sonrojadas, lo que me llama y me produce una sonrisa, algo que siempre lograba causar en las chicas y bueno....una humana no iba a ser la excepción.

Escucho lo que me dice, mientras pensaba en otras cosas y en una de esas la miro y le sonrio

-Por qué no vienes conmigo?...asi no te aburres y no me aburro...claro, si quieres-

- No para nada no me molesto. - le dije apenas prestando atención a eso, ahora estaba en la frenética deducción si podía o no darle esa descarga electromagnética a esta porqueria, y hacer un uso util y propio de ese pedazo de dispositivo que tenía en el cuerpo. - ... Pasa que. - Dejé las palabras inconclusas cuando le oí decir lo que había dicho.

¡Dios!, solo fue un segundo el que tardé para girar mirarlo y volver a lo que estaba. ¡Cuanta rabia!, jodida existencia? sabes pedazo de idiota, yo pongo el cuerpo, la vida y los tiros para que tu jodida existencia y los de tantos otros puedan ser tan jodidas como lo son para emborracharse sin mucha preocupación, como lo pones vos. - ¿Yo?, acompañarte?. - Me voltee con los ojos llenos de risas, o alegria como se lo quiciera ver.

Y entonces recordé que estaba hecha un desastre. Al menos para mi lo estaba. - No lo se mira como estoy. - Y le indiqué el ajustado traje blanco, que por lados se notaban algunas manchas de rose, producto de los entrenamientos. - No se, si no te diste cuenta pero, soy parte de la brigada, ejercito... Milicia como se te antoje decirlo. - Dije algo molesta por todo eso. Vez que conseguia media cita apuesta, el deber, el trabajo y la suciedad esta ahi junto conmigo como un tercero en discordia obstaculizando mis oportunidades de sociabilizar.

Estaba tan pero tan molesta que tipie cualquier clave, y le di enter propinandole una buena descarga magnética. La pantalla del cajero falló un par de veces y aceptó la clave no sin antes hacer cierto corto circuito en la conección electrica del banco. - Oups - murmuré casi inaudito en lo que cerraba los ojos orando de que la luz volviera.

- Creo que hizo un corto. - quité mis manos de la máquita que maltrazaba la imagen en la pantalla.

Me rio ligeramente cuando escucho su comentario sobre la ropa, la observo bien y veo que tenía razón lo que me hace sonreir y encojerme de hombros, pesando en que la mujer, por muy bella y hermosa que se viera nunca estaría satisfecha con lo que tiene en cuanto a gustos de moda, pero siempre se ven bellas y hermosas

-Y eso es un problema?, para mi te ves muy bella si me dejas decirte-

Le digo viendola de arrriba abajo y dando solo confirmación a lo que mis ojos veían y bueno se delitaban con semejante mujer.

Luego veo lo que pasa con el cajero, me quedo alzando una ceja y pensando en que diabls había pasado?, aun luego vulevo a verla y veo que ella había sigo

-eh?...qué le haces a la pobre maquina-

Iba de pasar a coquetearme a salir corriendo lo mas lejos de mi posible, me voltee a mirarlo teniendome de la maquina mientras una incontrolable risa se apoderaba de cada célula en mi piel. ¡Cielos, hacia mucho no reía asi!, las mejillas y el abdomen comenzaron a dolerme de tanta risa. - Te juro que yo no fuí. - dije sabiendo que nada de eso era verdad, tenía toda la culpa pero que iba a decir: Sabes que si, justamente formo parte de la UFE, una "sociedad" oculta dentro de toda la baraja del imperio y cuanta cosa, sin mesionar que batallamos contra la Corporativa Banshee para que tipos como tu sigan diciendo que salen a beber por un monton de miserables. No va quedar ni uno por el cual beber si acaso ganan... Mmm no, era demaciado duro.

- Lo juro, lo juro... - le repetí mientras ahogaba mi risa para retomar la postura, y girar a ver la maquina. Al parecer nada mas estaba atontada, no había quemado ningún dispositivo de gran importancia, o quizás el cable de transmición a la pantalla se habría sobre calentado. No importa.

Le dí otro toquesito mágico, o ¿magnético?. No se, pero como se rompió se iba arreglar. - Perfecto, al parecer quiere funcionar. - Dije sin quitar mi vista de la pantalla como si realmente me apasionara esa situación, ¿que haria de mi vida si no fuera lo que hizo mi padre "por mi"?, este dispositivo habia vuelto mi vida tan interesante... Tipee la cantidad de dinero que quería extraer, y tras parpadear la pantalla me entregó el dinero. - Así se hace chica. - Le hablé al cajero en lo que le daba unas palmaditas y tomaba el dinero para guardarlo en una fina billetera que saqué de un doblez de mi pantalón.

Sin embargo no podía dejar la conección electrica de esa forma. ¿O si?. Me voltee a mirar a mi recién conocido. - ¿Entonces que haremos?. - Dije mirando el lugar. - A menos que me des tiempo para acomodar esto... - deje aquello en suspenso, el corto podría causar una sobre carga o bien llamado un sobrecalentamiento, y luego... Pues boom.

Me recargo en una pared cerca de ahi y la observo tratando de anilzar la situación del cajero....y entre más lo pensaba más me reía
Era curioso, como con algo tan sencillo y tonto podría hacerte reir como, que tontería pero es y asi son las cosas, solo pensaba...el cajero va a hacer boom

-jajaja esta bien...hare de cuenta que te creo-

Saco un cigarrillo y con tocarlo en la punta lo enciendo, bendito fuego pene.
La fortuna de ser un demonio es que podía hacer con ese elemento lo que quisiera, asi que sonrio y no tardo en llevarlo a mi boca para coemenzar a fumar....que reljante

Observo la maquina y como ella dice para que ya quiere funcionar, la observo cruzandome de brazos y siguiendo fumando tranquilamente

-Tengamos una especie de cita...te parece?-

Le dije dandole una calada al cigarro y luego sacando el humo por la nariz...que genial se sentía hacer eso aunque debes de encuando pensaba en dejar de hacer eso

-Aceptas?-

STOP, había oido bien o la descarga me estaba afectando de verdad los oídos. ¿Una cita?, ¿tu?... ¿Conmigo?. Chico creo que las luces parpadeante no te dejan ver bien lo que tienes enfrente, soy de la milicia entiendes?, mecanica y por ende tengo las manos manchadas con la grasa de mis labores. ¿Que no viste?, o esto es camara oculta?... Se estan riendo de mi?. A todos esos pensamientos le acompañaba mi cara de total desconcierto, me sentia como china en calles de gran bretaña.

Lo miro entrecerrando los ojos en lo que soltaba la máquina. - ¿Enserio quieres una cita conmigo?. - Y me apunto con el dedo todavía sin saberlo, en lo que una risita que dejaba a la vista la alegria que poca gente tenía para los dias, se me clavaba en el rostro y la mirada. - Entonces es necesario que sepas algo antes que te pegues el susto sin previo aviso. - Me le acerqué un poco, pero no demaciado. Quité de un pequeñisimo compartimiento de mi cinturón blanco un par de dispositivos comparados a un iman que tras colocarme bajo ambas camaras les lancé y quedaron automáticamente pegados.

- Tengo veinticiete años. - Comencé hablar como para ir espantándolo. - Mi utimo novio fue como hace cuatro años, estoy soltera desde entonces. - Y quien podía pensar en novios teniendo que hacer una año de corrección y uno de entrenamiento para formar parte de las filas de una sociedad que se supone que no existe. Giré y busqué la caja central de electricidad para arreglar el problema antes que todo volara en pedazitos. - El ha sido el primero y unico novio que he tenido y ademas es un mercenario. - Abrí la puertecilla y me dejo ver los interruptores algunos bajos otros altos... veamos...

- Me sedució y me uní a ellos... Unos cuatro o cinco años. - tras subir y bajar un par de veces el interruptor principal, me di cuenta que pasaba... Se fundió medio cable seguro. La culpa era de él, si no hubiese despertado ese cambio repentino emocional no le hubiese dado una descarga de 220. Okey, no se de que gravedad fue, pero casi hago reventar todo. - Despues, bueno... Digamos que me descubrieron... - Sí!, como una potencial arma de destrucción masiva!, okey... volvia a exagerar... - Y tuve un año en lo que llaman "la correccional". - La mire poniendole emoción a ello mientras abria un cierre localizado en mi pierna izquierda dejando ver pequeñas herramientas de todo tipo, no mas que lo básico para todo lo que realmente utilizaba a diario. Pero, no podía estar sin ellas... por ese tipo de cosas.

- Pero soy una orgullosa master para la mecánica. ¿No lo viste?. - Le digo volteando hacia el y mostrandole las orillas de mis uñas sucias con un poco de grasa, volví a mis labores... Lamentablemente el cable no tenía arreglo, lo fundido fundido está. Arranqué la tapa del cajero automático y le quité un par de cables. Esta bien, el siguiente que viniera a sacar plata del cajero se iba a morir de cólera... Mejor eso, a que sus tripas fueran regadas por toda la calle.

Empecé un arreglo bastante "casero" a la problemática, no sin antes dar de baja la corriente o podía lamentarlo. - Todavía estas dispuesto?. - No sé para que le contaba todo eso, era realmente estúpida... Semejante bombonazo me invitaba a una cita y yo le cantaba un millón de cosas como para que saliera despavorido. Pero, eso era apenas el plato principal.

Seguía fumando tranquilamente, jugando con mi mano feliz de la vida apareciendo un poco de fuego y viendo como ardía en mi mano...era tan precioso, tenía el toque de la pasión, el deseo, la lujuria...en si todos los pecados capitales, lo que para mi con la suma de esos 7 se me hacia suamente atractivo.

Mientras observaba la flama en mi mano y fuma lo que quedaba de cigarro, volteoa verla cuando comienza on su explicación...sobre ella...interesante.
Mientras la escuchaba me daba cuenta de que al parecer trataba de espantarme, lo que llamo mi atención. Pensaba que podría conseguirlo pero no, soy un demonio, abogado...que muy dificilmente se deja convencer con argumentos como ese...por Dios ._.

-Mmm interesante tu vida eh?...muy interesante-

Termino mi cigarro y lo tiro l suelo para luego pisarlo y verla a los ojos. Seguía con la firme idea de tener una cita con ella, que extraño lo se pero cuando quiero algo lo consigo. Por eso siempre ganaba en los juicios, soy demasiado genial contra simples mortales.

-Claro que estoy dispuesto, sigo firme con la misma idea de tener una cita contigo...tu apariencia y tu vida personal de momento no me interesan...si aceptas tendremos tiempo de conocernos no crees?-

Digo acercandome a ella y poniendo una mano en su mejilla para retirarla rapidamente, no la fuera a quemar después de andar jugando con fuego...aunque jugar con fuego es muy interesante.

-Si quieres saber algo de mi con gusto te lo dire, no tengo nada que ocultar-

Le digo tranquilamente antes de volver a recarge en la pared y luego volver a fumar

Era curioso pero mientras trabajaba y el guardaba silencio juraría que podía oir el sonido de flamas. ¿Flamas?... LLAMAS! FUEGO!. Levanté la mirada por ensima de la tapa de la caja central, lo miré y miré todo al rededor pero, no vi nada.
Se me achico el ojo derecho, ¿estaría enloqueciendo? era lo mas probable. Negué pausadamente mientras volvia mis ojos mis manos y la atencion a lo que hacia, o llegaría la policia y me costaría no solo la placa, la cabeza la identidad. Todo lo que me pudieran sacar me lo sacarían, bueno de ultima siempre había donde ir acobijarse, es decir... Esta la corp. Banshee.

Esta bien, esta bien... Solo bromeaba.

El se asercó, y lo miré de reojo mientras intentaba no distraerme en lo que buscaba la forma mas fácil de quitar los molestos tornillos que no me dejaban ver los cables principales. Pero, con sus curiosos ojos mirandomé obviamente no podría hacer uso del magnetismo otra vez, bastantes cosas raras había hecho ya.
Su mano me toco por milésimas la mejilla y no voy a mentir, me sorprendí al punto que mi corazón dio un salto, otra vez una bocanada de magnetismo salio despedida de mi cuerpo haciendo que la puerta del tablero me golpee en la espalda.

Cerré los ojos mientras me sonreía, tenia tantas ganas de decirle: No vuelvas a hacer eso si no quieres que salgamos muertos. Pero, obviamente no era posible decirle eso, no podía pasar por histerica y mal educada a la vez. - Auch. - dije muy bajito en lo que separaba con cierta dificultad la puta puerta de mi espalda. - ¿Crees en fantasmas?... - pregunté justo en el momento cuando me dijo que seguía con la idea firme de tener una cita conmigo... Mierda, realmente era mala para apabuyir chicos.

- No lo puedo creer, quieres salir con una ex-convicta. - Esta bien tenia cara de angel, lo admitia... pero tambien me aprobechaba de eso de vez encuando. Saqué la medida justa de destornillador y comencé aflojar los tornillos de forma manual que se habían aflojado un poco con mi nuevo cambio emociomagnetico, suena bien... y me lo acabo de inventar. Me sonreí por ello mas que por lo que el decía.

- Esta bien, pero... Te lo adverti. - Le dije para luego sonreirle y mirarlo en lo que con cuidado separaba la tapa enganchada a casi un millar de cables. - No es tan complicado como parece lo juro... - apoyé la tapa bajo mi cuello y estirando el brazo en el que sostenía los cables robados al cajero, intercambie un par que ví algo chamuscados y un tercero que podría haberse afectado.

Observo atentamente lo que hacia, estaba muy entrenido viendo chispitas por ahi, chispitas por halla, unos cables cerca de ella...estaba demasiado entretenido viendo como trabajaba, lo cual me hacía sonreir traviesamente. Me entro la curiosidad de saber que pasaria si quemaba un cable, de seguro el cajero haría boom.

-Fantasmas?...creo en cosas muchisimo peores linda, pero tambien en esas cosas jajaja-

Me rio un poco sin dejar de verla y con mucha curiosidad, me llamaba la atencion la forma en que trabajaba con el cajero, los cables y como es que esa cosas seguía sin hacer boom.

-Ex-convicta?...ok eso no me lo esperaba... pero sigo firme en mi idea, ese pequeño detalle de que estuviste en la cacel no es suficiente para mi-

Y la verdad no me interesaba mucho, solo quería salir con ella...como si de verdad me importara lo que la gente fuera a decir de mi.

-Para ti no es complicado, pero para mi silo es, se ve facil pero no quiero que esa cosa haga boom estando cerca de ella...mejor dejo que sigas trabajando, al menos que quieras mi ayuda claro esta-

Se estaba pasando de insistente, giré mis ojos y cerré algo brusca la tapa del tablero mientras uno a uno le coloqué los tornillos, y tomando aire con cierta fuerza para controlar un diminuto ataque de rabía.

- Mi padre me hablaba de chicos como vos cuando tenía menos de seis años. - sonriente lo volví a mirar mientras levantaba el interruptor de corriente general, las luces se encendieron. - Ahora veo para que. - cerré la tapa del tablero, me agaché y volví a pegar la puerta del cajero con unos toquecitos electromanéticos, todo parecia andar sobre ruedas menos el cajero por razónes obvias.

- Un momento... - cerré el bolsillo donde tenía todo tipo de chucherias mecanicas de tamaño pequeño y de mi bolsillo saqué un labial rojo. Si, ese que usaba cada vez que necesitaba sentirme segura frente a cualquier situacion dificil, escribí sobre la tapa del tablero principal "Reparenme", miré a Dmitry y sonriente me pinté los labios, para volver a mirar la tapa y volví a escribir "Lo siento".

- Creo que ya esta todo. - ciertamente me empezaba a pegar la timidez y metí mi mano en el bolsilo para dejar el labial. - Y seguro que no hace boom. - me mordí la pielcita de los labios mientras esperaba a ver que me decía, ya no tenía miedo que me mirara como a bicho raro, ya no lo habia hecho antes, menos lo hiba hacer ahora.
Pero, no se si era que no se daba cuenta o que le pasaba, y bueno... Tendría que ver como en la "cita" controlaba mis descarga emociomagneticas.

Me cruzo de brazos y vuelvo a jugar con fuego. Este elemento de la narutaleza que infunde miedo, temor, pero qjue a la vez es simbolo de poder y de pasión...tantos significados y todos tan distintos entre si. Interesante para alguién que sabe controlar este elemento.

Alzo mi mirada para poder observarla y sonreirle. Sus pequeñas conexiones la hacían verse demasiado sexy, lo que me hace sonreir y a la vez preguntarme por qué tenía curiosidad con ella?, eso era algo que no tenía pensando descubrir en estos momentos, si ella aceptaba salir conmigo quizas lo descubriera.

-Veo que tu padre te hablo de los diferentes tipos de chicos que hay en el mundo... pero yo soy diferente a los que tu conoces, de eso puedo estar seguro-

Le digo dejando de jugar con fuego y a la vez chasqueando mis dedos, comenzando a producir chispas mientras me reía traviesamente

-Jajaja lo mejor sera irnos ants de que se me ocurra causar una explosión...aunque dudo que eso pase pero no esta demás prevenir-

Me acerco a la puerta y espero a que salga, observando el lugar y tratando de que no quedara algo mal puesto, pero al parecer todo seguía en orden

-Já...bonita forma de arreglar las cosas... pero te quedo bien...salvo lo que pusiste en el cajero, pero no importa...nos vamos?-

Un momento, ahora mas que nunca estaba segura de lo que escuchaba y del tipo de luz que emitía. Es decir, si había fuego. Me voltee apresurada para verlo, pero estaba ahi como si nada, me quedé algo... Desconsertada, hubiese jurado que se estaba prendiendo fuego vivo. Abri la boca para hablar pero ningún sonido salio de esta, el ya se estaba moviendo hacia la salida... ¿Que iba hacer yo ahi paradota?.
Miré a los lados como si se me hubiera perdido algo. Caminé a el algo extañada todavia. ¿Que diablos era?.

Teníamos ya los pies fuera del Banco. - Si, claro... Nos vamos. - justo cuando me creo que esto puede ser algo normal. La normalidad estaba lejos de mi vida ahora, muy lejos. Quizás, jamás habia tenido "normalidad" en toda mi existencia. Camine lento esperando a que siguiera mis pasos, giré a verlo y asi terminamos caminando a la par.
Vi la primer y tal vez unica oportunidad de poder sacarlo de la via visible, una calleja poco iluminada, con luces parpadeantes. Miré a los lados, atras adelante...

Tenía que hacer una jugada sucia, pero hacerla. Lo agarré de los hombros en un envión, y mirandolo con nervios y sin saber mucho que hacer lo besé de un arrebato mientras lo empujaba al callejón y le daba una descarga para imposibilitarlo un poco de cualquier movimiento.

Me separé de inmediato respiré de golpe, porque hasta incluso habia dejado de hacerlo ... - ¡Que cosa eres!?. - no tenía mejor idea que preguntar, y me puse en guardia.

Dejo que salga del banco sin dejar de mirarla....me volví demasiado curioso desde que la vi y bueno la chica tenía la culpa por ser demasiado guapa.

Camino a su paso mientras volvía a fumar, con una mano dentro del bolsillo del pantalón y observando al cielo que curiosamente tenia estrellas que nunca antes había visto.
Raro y sin gracia...en fin lo mío era hacer travesuras y maldades aunque fuera abogado...pensandolo bien, hacer maldades para mi significaba diversión y ser abogado me daba la libertad de hacer unas más malosas.

Mientras caminamos la observo de reojo, confirmando la teoría de que por culpa de ella me había vuelto más curioso lo que en un demonio estaba mal visto.
Lo que llamo más mi curiosidad fue hacia donde nos dirigiamos, una calleja con escazes de luz, lo que me hizo alzar una ceja...qué estaría planeando esta rubia tan interesante?.

Lo que me dejo completamente atontado fue lo que hizo.
Por un lado me besa, beso que disfruto ya que desde que la vi había querido probar sus labios...dulces como me lo espere pero tenían otra cosa que de momento no supe identificar, hasta que me dio un descarga lo que hace que quede paralizado.

La observo ante su cuestionamiento y me encojo de hombros, había que decirle lo que era realmente y eso que había pensando que ya se había dado cuenta....digo cuantos pueden aparecer y desaparecer fuego?

-Qué soy?...de verdad quieres saberlo?-

La miro curisosamente alzando una ceja y sonriendo divertidamente para después acercarme a sus labios y lamerlos para después volver a mi postura original

-Soy un demonio, eso es lo que soy-

Le digo apareciendo una flama en mi mano y jugando con ella sin dejar de verla a los ojos

¿¡Como fue lo que dijo!?, ¿un demonio?... Un calculo como dos mas dos son cuatro y este seguro trabaja para la Banshee, mas vale terminaba el trabajo rápido... ¡Y ademas quien le había dado permiso para lamerme los labios!. Lo toque volviendole a dar una descarga y lo acorralé contra la pared. - ¿Para quien trabajas?. - oh que pregunta estúpida. - No creas que vas a venir a convencerme de unirme a la corporativa. - Saqué la placa que me identificaba como parte de las Fuerzas Especiales.

La unico demonio que conocia era una amiga que no veia desde hace mucho tiempo, y que poco y nada sabia de su paradero desde que se habia escapado de su orfanato hace demaciado tiempo atrás. Ese recuerdo me revolvio todo por dentro, casi me daban ganas de llorar, como si en dos segundos y por unas pocas palabras y pensamientos me diera cuenta cuan derrumbada estaba mi vida.

Lo solte para darle al menos la posibilidad de defenderse, me separé dudando de sus intenciones y fijandome como el labial rojo se había marcado tambien en sus labios por aquel beso forzado. - Y nadie te dio permiso a que me pongas las manos encima!!, si no te diste cuenta solo fue una técnica... - sucia tecnica. - de desplasiamiento de atencion. - una rateada que había aprendido con los mercenarios, sucio... pero útil. Atraje a mi mano un caño que estaba caido junto a mis pies, por medio de mi cualidad biótica, lo tomé con firmeza y volvi a colocarme en guardia

Observo sus movimientos y lo único que hago es reirme de sus reacciones.
Sin duda la chic me agradaba y estaba algo loquita, pero eso era lo de menos para mi ra como un atractivo visual y era muy divertido estar junto a ella.
Desaparesco el fuego y como si nada me sacudo las arrugas que djo en mi ropa viendola después para comenzar a reirme.

-Tranquila, juro que mis intenciones contigo son buenas-

Alzo mis manos demostrandole que no le haría nada y tomando en cuenta de que soy un demonio era bastante raro que no lo hiciera

-Mira-

Saco mi billetera y le demuestro la identificación que demuestra que formo parte de la "Alianza" y que por si fuera poco era el abogado de todos, o por lo menos de la gran mayoria de ese lugar.

-Siento por pasar mi lenguita por tus labios, pero eres demasiada tentación para mi-

Le digo tranquilamente y extendiendole mi identificación, no sabía porque lo hacia...supongo que la situación me causaba demasiada gracia

Estaba jurando, mas le convenía que fuera verdad o se le moriría alguien, pero a mi eso no me importaba poque la verdad que no conocía a nadie por su parte, o eso creo...
Cuando metió su mano en el bolsillo no pude evitar que mis nervios se pusieran de punta otra vez, pero saco su billetera y parecia querer mostrarme la placa de la alianza.

Extendí mi mano y con una onda biótica arrebate la billetera de sus manos, observe cada detalle de la placa y era verdadera, abri mi otra mano y deje caer el caño al piso. Miré a un lado sin mover el rostro y mordiendome el labio de la vergüenza, no solo lo habia besado de imprevisto. Si no que ademas le habia dado una descarga, y casi se me ocurre volarle la cabeza con un caño... Al abogado de las Fuerzas Especiales.

- Heee. - Observe la placa por ultima vez, cerré la billetera con una sola mano y se la devolví lanzandola suavemente. - ...Tienes razón - Ohooo tragame "tierra", yo y mis ideas de peliculas de ciencia ficción. Escuche eso de demaciada tentación para mi, o era un casanova o estaba en mi noche de suerte porque con la pinta que cagaba lo unico que podia atraer o eran ratas o maleantes.
Nada de vestidos finos, ni cabello liso y sedoso. Al contrario, estaban algo ondulados, y con medio traje de las fuerzas.

- Tentacion?. - ya estaba encaminandome devuelta a la calle, cuando giré a verlo. - A ver como me lo explicas. ¿Como es que tu, un abogado renombrado, se podría fijar en una simple soldado como yo?. - hacía poco tiempo habia entrado a las Fuerzas, aun no entraba en el campo de combate por bien asi llamarlo, aunque si habia estado en otros casos en mi vida como mercenaria y que no es lo mismo hablar de una pequeña riña callejera a una guerra de tamaño industrial.

Tomo mi billetera y la observo tranquilamente sin dejar de sonreirle.
Esto era extraño, solo la podía observa y darme cuenta de que en verdad era atractiva, lo que me hacia pensar como se veía con otro tipo de ropa?, digo algo más arreglada.

Me quedo pensando en esa posibilidad y me doy cuenta que es algo que no me importaba, asi que solo sonrio y niego con la cabeza sin dejar de verla

-Soy abogado, pero eso no significa que algo simple e atraiga demasiado...como tu. Aveces las cosas simples...aunque no lo creas viniendo de la palabra de un abogado-

Le digo sin dejar de verla, me acerco a ella y le tomo la mano para poder observarla y sonreirle, mientras con mi mano la acaricio y me fijo que sus manos no eran suaves, pero se veían bien...mmm tenía algo que me gustaba.

-Me gustan tus manos-

La suelto y la miro a los ojos

-Perdona por ser tan atrevido-

Me dio una explicacion, me senti algo mejor por eso... Era muy tierno en cierto sentido, pero igual no podia dejarme seducir tan rápido y menos por un demonio que vayase a saber que cosas traman estas criaturas raras. Se acerco y ya me estaba poniendo nerviosa devuelta. Me sonrei con cierta incomodidad mientras me tomaba la mano, ¡dios mio la acaricio!... No que horror!, las tengo como si fueran lija para la pared. Inmediatamente cuando me la solto intente ocultarla detrás de mi cuerpo.
Se disculpo por el atrevimiento, un poquito tarde he!... Respiré lo mas profundo que pude mientras sostenía la misma sonrisa.

- Si, gracias... Y por lo de atrevido creo que la disculpa llega algo tarde. - Apunto a la pared donde hacia rato lo habia acorralado. - Igual creo que estamos a mano y... - Me lamo el labio con nervios e intentando aguantar un poco la risa, él todavia tenia los labios marcados con mi labial rojo y eso ahora que lo podia ver mejor por la luz se veía bastante, afeminado. - Tu bo.. ca eeem. - Ya no podía seguir hablando, solte un risa de nervios y de gracia porque tenia la boca pintada.

- ¡Estas pintado!, Límpiate la boca!. - mi voz estaba algo forzada porque estaba aguantandome la risa. Me aleje un poco para volver a la vereda, lo mire desde ahi sonriendo algo nerviosa y me acomodé un mechon de pelo detrás de la oreja. - Si todavia estas interesado en una cita con esta loca... Creo que puedo hacer un desorden. -

La observo curiosamente al er como escondía la mano, era tierna su forma de ser buscando la manera de intentar no tener una cita conmigo, pro solo era una cita...no la iba a violar.

Observo que sus ojos miraban hacia mis labos y por la forma de sus facciones parecia que deseaba reirse, no entendía mucho de qué hasta que paso mi dedo mis labios y veo que tenian labial.
Alzo una ceja para poder mirarla y hacerme el ofendido

-Creo que pudiste decirme ese detalle desde antes linda-

Saco un pañuelo de mi pantalón y me limpio los labios, algo que no me hizo feliz porque sería borrar el beso de la bella dama que tenía enfrente.

-Claro que sigo interesado, aunque te niegues a creerlo las apariencias no me importan por muy abogado que sea, asi que si el problema es tu ropa y eso no te preocupes que a mi no me interesa-

Me acerco y le doy un beso en la mejilla para luego separarme y sonreirle mientras volvía a verla, viendo como se acomodaba un mechón rubio

Ellos y sus discursos elaborados, cosas como; las apariencias no me interesan. No claro, porque seguramente este traje de combate no me resalta para nada el trasero. No importa, ¿sabes?... te dejaré creer que vas ganando esta tirada. Caminamos por un rato.
- Asique eres abogado de la "alianza". - algo de sarcasmo se me fue con lo de la alianza, yo ya reconocia cual era la placa de la alianza y cual la que tapaba a los de las UFE, detalles tontos pero solo para ojos fijados.

- Yo soy soldado ahora. - Dije mientras llevaba mis manos a los bolsillos traseros de mi traje. - Soy experta en mecanica y tecnología, lo aprendi desde niña, bueno ya sabes... - no recordaba si ya habia dicho eso. -... Y tu trabajo exactamente a que se remonta dentro de la alianza?. - no ibamos a ir por la calle hablando de uniones de fuerzas especiales, era un secreto de ultratumba.